La
Motivación Familiar.
La
unidad familiar puede ser una fuente importante de estabilidad, seguridad,
felicidad y sobretodo de motivación, el vivir, o mejor dicho convivir con otras personas únicas conlleva un esfuerzo personal de comprensión, convicción, y automotivación diaria para la consecución de los proyectos comunes y personales.
Cuando las cosas van
mal dentro de esta unidad, la motivación familiar y la automotivación personal puede convertirse en lo contrario: una fuente de gran angustia que se va a trasladar a otras facetas de nuestras vidas (la social, la laboral).
En esos momentos de angustia debes buscar apoyo en tu
propia automotivación y da igual el papel, el posicionamiento que desempeñes en esa unidad familiar. Debes encontrar tu "yo", hacer preguntas a tu pareja, a descubrir o mejor redescubrir la familia, a veces incluso a olvidarnos de nuestra edad cronológica y si es necesaria a cambiar nuestro plan de vida; recordar que debemos reinventarnos constantemente.
Normalmente durante el primer año de convivencia marital la pareja se llevan bien pero
pasado el año empiezan algunas complicaciones, empiezan a aparecer las
sorpresas y las diferencias normales de ser seres únicos; las crisis de parejas más fuertes se ha observado que se dan alrededor de los cinco años de convivencia; en este momento comienza el aburrimiento, las angustias, la falta de identificación con el proyecto, los cambios en la forma de amar, la vuelta hacia el egocentrismo. Comenzamos a encontrarnos mal, surgen dudas y tenemos que reforzar nuestra autoestima; cuando nosotros no somos capaces de identificar lo que nos ocurre debemos buscar un profesional que nos ayude a superar este momento, debemos buscar un Coach.
A pesar de
que una pareja pueda estar casada hace años el hecho de que se compartan las
tareas, proyectos, y responsabilidades, no significa sin embargo que la vida
del otro puede afectar a la automotivación de alguno de ello y con ello a la motivación de la familia o de la unidad familiar.
El deseo de
mantener una familia unida está en mantener un equilibrio muy delicado de la
comunicación y el compromiso entre los integrantes. No es una tarea fácil, pero
cuando dos personas se comprometen entre sí, se aman, son complices de vida (comprensión, complicidad, estima personal) y quieren estar juntos, la
motivación de la familia es el lazo que une la estructura familiar.
Cuando las
parejas tienen problemas, la motivación de la familia entra en juego. Si un
esposo y una esposa realmente quieren que el matrimonio funcione, tienen que
estar dispuestos a hacer mantener su automotivación en los momentos que no
funcione para que la motivación familiar permanezca viva, tiene que aprender a inventar nuestras fórmulas de convivencia, de amor, de proyección hacia el futuro,un nuevo plan de vida a desarrollar.
Tienen que
aprender a apreciar la unidad familiar como un ente más que están formando
juntos como un equipo con sus propias metas y objetivos. La motivación del
equipo es responsabilidad de la automotivación de los integrantes y por eso
cuando uno de ellos esta desmotivado los otros integrantes han de aportar más automotivación
para mantener la motivación del equipo al mismo nivel. Si no son capaces de
hacer esto, su unidad familiar se vendrá abajo junto con su relación.
Si las
parejas tienen dificultades para resolver sus problemas solos, la motivación de
la familia puede empujarles a buscar ayuda o asesoría externa. Las parejas
pueden visitar a un especialista, a un Coach. Esto hará que se tome conciencia
que cada miembro de la familia debe estar automotivado para que la
atmosfera familiar este motivada y pueda existir una motivación familiar
alta.
Cultiva tu automotivación, es un gran ejemplo y
aporte para tu motivación familiar y mantiene a tu familia en equilibrio. Sin
la motivación familiar los lazos familiares se van debilitando y al final se
rompen.
Siempre que haya AMOR, estás a tiempo de reinventarte.